Una película patrocinada de 19 minutos titulado ” Business Unusual” es una declaración clara de posicionamiento. El spot original y con final impredecible no hace publicidad de forma directa a la marca como es lo tradicional, sino por el contrario la hace parte de una historia, logrando transmitir el mensaje con total claridad y crear identificación por parte del viajero de negocios que busca disfrutar experiencias exóticas, fascinantes y vibrantes.Tienen que verlo es fenomenal. Acá lo tienen.

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El Renaissance New York Midtown Hotel es el alojamiento insignia que revolucionará el futuro del alojamiento en la era digital, en su inaguración todos los 250 empleados de la propiedad estaban en una sesión de ánimo y de entrenamiento no sólo para dar un gran servicio sino para fomentar momentos memorables que provendrán de si los botones, camareras y camareros pueden encontrar formas de auténtica sorpresa.

Renaissance hotels todavía tiene que demostrar que tiene lo que se necesita para sobrevivir y prosperar en lo que es un mercado cada vez más saturado y cambiante. Diez cadenas hoteleras ofrecen alrededor de 115 marcas y alrededor de 30 tienen menos de 10 años de edad. Entonces si Ritz- Carlton es sinónimo de lujo, Westin es la cama divina y W es hoteles de moda,¿cuál es el soporte de Renaissance hotels?.

Stoeckl el vicepresidente que supervisa la marca propiedad de Marriot Internacional dice que la marca es “fearlessly chic” sin miedo a la elegancia, centrada en los viajeros que buscan llevar historias a su hogar, incluso en un viaje de negocios están interesados en descubrir y quieren algo que sea auténtico y local. El eslogan de campaña es “Business Unusual” o “Negocios inusuales”. El concepto de marca también da puntuaciones muy altas  para los viajeros de la próxima generación. Su clara segmentación que tienen presente en cada una de sus acciones es resaltada por Stoeckl con la reconocida frase: “Nosotros no queremos ser algo para todo el mundo. Queremos ser todo para alguien”.

Los huéspedes y visitantes que entran en el hotel interactuarán con unas pantallas digitales sensibles proyectadas a lo largo del pasillo, un pasaje sutil y orgánico que no cambia por sí mismo, sólo responde al movimiento humano, los clientes también encontrarán imágenes digitales de artistas locales y experiencias vecinales, que muestran el tapiz vibrante de la ciudad y la energía del distrito del fashion de los alrededores. Parte del elemento “vivo ” de la experiencia del cliente será un asistente virtual situado en el hotel, cuando un usuario pisa las palabras que llamen su atención del piso esto activa una pantalla que muestra la información seleccionada por el cliente, que puede ser sobre cocina local, música en vivo, teatro, compras y otras actividades locales. El hotel también cuenta con el bar del vestíbulo, salón Club de huéspedes asiduos y 4.500 pies cuadrados de espacio para reuniones, restaurante gourmet, terraza de 8.000 pies cuadrados y un techo retráctil.

La cadena ha generado nuevos vínculos a través de la música y el arte con los clientes jóvenes integrando eventos musicales en la agenda de actividades del hotel, pero aún no ha ganado la aprobación de los medios de comunicación de la industria de viajes, ya que muchos recuerdan su historia llena de baches bajo tres titularidades; no fue hasta 1997 que Renaissance terminó en las manos de Marriott y hace sólo unos siete años se dirigió en su enfoque actual. Stoeckl ha liderado el esfuerzo por transformar la posición de Renaissance hotels desde 2009, el reto es grande porque el soporte de la marca está claro pero tienen que proyectar un ciclo de renovaciones en las extensas propiedades de la cadena  ya que muchas de ellas no reflejan la visión de la marca. La inaguración de Renaissance en New York es decisiva porque al ser su insignia dejará su impronta para construir valor futuro y posibilitar una continuidad en el tiempo.

La marca utiliza un enfoque de comunicación no tradicional que gira alrededor de los contenidos, el plan de marketing incluye trabajar con bloggers influyentes en la moda, tomando una inmersión profunda en el vecindario local que es distrito de la moda en New York, crean alianzas con la comunidad local y asociaciones con negocios cercanos. Stoeckl piensa que los consumidores que entran en los hoteles Renaissance se impresionan lo suficiente como para volver a buscarlos cuando viajan. La coherencia del mensaje con las memorias que se lleven los turistas serán decisivas para el futuro de la compañía.

Fotos del Hotel Renaissance en Barcelona: [foogallery id=”2778″] Fotos del Hotel Renaissance en Londres: